viernes, 1 de diciembre de 2017





Riesgos geológicos por emisiones volcánicas




Entendemos por riesgo geológico todo proceso o suceso en el medio geológico, natural o inducido, que puede generar un daño económico o social para el hombre o seres vivos.

Las zonas próximas a los volcanes son tierras fértiles, ricas en recursos minerales y energía geotérmica por lo que es hombre se ha instalado en estas áreas convirtiendo así un proceso natural en un grave riesgo.
Los factores que intensifican el riesgo del vulcanismo son:
Incremento de la población que se asienta sobre ellos, aumentando de esta manera el factor de exposición.
El tipo de erupción que tenga lugar. La explosividad de las erupciones depende del tipo de lava, o sea, de la viscosidad de la lava y de la presencia o ausencia de gases.
Frecuencia de las erupciones.
Los principales riesgos volcánicos son:
Coladas de lava que pueden cubrir extensas zonas.
Lluvias de piroclastos, cuya caída puede provocar muertes, debido al impacto, hundimiento de las construcciones o destrozos de los cultivos.
La formación de calderas.
Las nubes ardientes, que es la manifestación volcánica más peligrosa. Consiste en una emisión de gases ardientes, fragmentos de lava y cenizas, que descienden por la ladera a gran velocidad (100 km/h). Provocan graves daños por combustión y muertes por asfixia debido a la inhalación de polvo al rojo vivo y terribles quemaduras.
Otros riesgos asociados a las actividades volcánicas son:
Las erupciones freato-magmáticas. Ocurren cuando el magma al ascender atraviesa un acuífero, o cuando entra agua marina en la cámara magmática, lo que hace aumentar la presión interna y la violencia de la erupción.
Los lahares. Son corrientes o flujos de lodo formados a causa de las lluvias que provoca el vapor de agua que expulsa el volcán o bien porque se funde la nieve de las cumbres debido al calor. Su velocidad asciende a decenas de km/h originando efectos devastadores.
Los tsunamis. Son olas gigantescas de hasta 50 m de altura producidas por terremotos marinos o erupciones volcánicas submarinas. Estas olas pueden ser más dañinas que el propio volcán.
Movimiento de ladera. Deslizamientos, desprendimientos y avalanchas debido a los temblores que pueden llegar a sepultar poblaciones enteras y cultivos.
Emisión de gases tóxicos asfixiante.
Cambios climáticos: Producidos por la incorporación de cenizas en la estratosfera.

Yo pienso que nosotros podríamos hacer algo para impedir que este terrible suceso ocurra, ya que las personas podrían ser un factor por el que esto podría ocurrir. Pero una pequeña parte está en nosotros pero la otra es de la naturaleza.
Lidia Quintero Armas.